He de confesarte que he necesitado un par de lecturas para poder empaparme de todo tu ensayo y hasta me lo he impreso para poder subrayar y tomar notas. La forma de hilar conceptos e ideas y, además, de hilarnos a los 4 contigo es muestra inequívoca de la intersubjetividad —tensa— en la que nos hayamos: es en ese "entre" donde se teje la vida con todas sus facetas y claroscuros.
Entre nuestras aproximaciones a la vida y la tuya has dado lugar a un "entre" alible para con un tercero: los lectores.
Me honras con tu comentario, Cuca. Te agradezco que lo hayas desmenuzado. Y me ha gustado esa idea que deslizas sobre el “entre” que al final hemos podido crear entre todos y servir a los lectores. Un placer seguir. Gracias a ti.
Me encantó el símil del mapa. La esfera es, en efecto, el motor de nuestro progreso.
La aspiración a la totalidad es irrenunciable porque no es el destino, sino el vector de optimización. Nos da dirección.
El valor real reside en asegurar que cada nueva cara del poliedro que construimos sea una mejora medible respecto a la anterior, aunque la perfección esté siempre a un paso de distancia. El gap es lo que nos hace avanzar.
Me encantó el símil del mapa. La esfera es, en efecto, el motor de nuestro progreso.
La aspiración a la totalidad es irrenunciable porque no es el destino, sino el vector de optimización. Nos da dirección.
El valor real reside en asegurar que cada nueva cara del poliedro que construimos sea una mejora medible respecto a la anterior, aunque la perfección esté siempre a un paso de distancia. El gap es lo que nos hace avanzar.
Me lleva a pensar en el plano de nuestros límites cognitivos.
Más allá de esto, un artículo genial. De esos que se agradece con el corazón porque es lo que uno mismo hubiera querido explicar ( y lo ha intentado alguna vez con penosos resultados) y lo encuentra aquí magníficamente realizado y con mil pinceladas de saber más.
No sólo es original, Javier, es brillante. La amplitud de tu conocimiento junto con tu manera única de hilar conceptos para fundamentar tus creencias y pensamientos forman un combo que da un resultado magnífico.
Tu versatilidad es apabullante y me resulta fascinante tu capacidad para conectar la información. Me encantaría ver por un agujerito tu proceso de escritura😅. Cómo se van engarzando las distintas ideas hasta dar forma al texto escrito.
Dicho esto, creo que la perfección de nuestro mundo reside en la imperfección del poliedro irregular que aspira a convertirse en esfera perfecta. Porque sin esa búsqueda infinita de lo inalcanzable, sin el misterio, ¿no habríamos llegado al fin de todo? Si no queda nada que preguntarse, si todo encaja de manera exacta y sin desviación, ¿dónde queda la duda y la imaginación, la creatividad y el crecimiento? La cuestión, quizá, está en cuánta de esa imperfección estamos dispuestos a aceptar como individuos o sociedad.
Por otro lado, no puedo evitar preguntarme - y preguntarte - si no existe en la historia de la filosofía el realismo "humano", o "humanista". Una suerte de realismo enraizado en una "ética compartida de mínimos razonables", citándote a tí mismo.
En cuanto a esa idea de la verdad... Me gustaría destacar que veo con preocupación como la diferencia entre verdad y realidad se está diluyendo en la actualidad. No digo que sea algo que se infiera de tu texto, para nada, sino que al leerte me ha recordado una conversación reciente con alguien que no tenía clara esta diferencia.
Me parece importante ahondar en la verdad como un constructo subjetivo que puede ser moral y éticamente aceptable o no, mientras que la realidad es, sin embargo, más susceptible de ser objetivable, si aceptamos la realidad como lo que ocurre en el mundo que nos rodea fuera de todo juicio moral o ético. Por eso creo que hay tantas verdades como individuos dentro de una misma realidad.
La confusión de ambos términos de manera intencionada para hacerlo todo más borroso por parte de "ideólogos" nos deja en indefensión ante el sistema. Si comenzamos a dudar de lo que ven nuestros ojos para aceptar como propia una supuesta verdad estamos en peligro de perder nuestra autonomía para pensar en libertad, si es que esto ha sido, es y puede llegar a ser posible.
Perdón por la perorata, pero tus textos tienen esa capacidad de activar la mente y buscar esas imperfecciones que nos acercan un poco más, si es posible, a lo inalcanzable.
Estimado Javier.
He de confesarte que he necesitado un par de lecturas para poder empaparme de todo tu ensayo y hasta me lo he impreso para poder subrayar y tomar notas. La forma de hilar conceptos e ideas y, además, de hilarnos a los 4 contigo es muestra inequívoca de la intersubjetividad —tensa— en la que nos hayamos: es en ese "entre" donde se teje la vida con todas sus facetas y claroscuros.
Entre nuestras aproximaciones a la vida y la tuya has dado lugar a un "entre" alible para con un tercero: los lectores.
Tu mapa es, también, un faro.
Gracias, de corazón.
Me honras con tu comentario, Cuca. Te agradezco que lo hayas desmenuzado. Y me ha gustado esa idea que deslizas sobre el “entre” que al final hemos podido crear entre todos y servir a los lectores. Un placer seguir. Gracias a ti.
Me encantó el símil del mapa. La esfera es, en efecto, el motor de nuestro progreso.
La aspiración a la totalidad es irrenunciable porque no es el destino, sino el vector de optimización. Nos da dirección.
El valor real reside en asegurar que cada nueva cara del poliedro que construimos sea una mejora medible respecto a la anterior, aunque la perfección esté siempre a un paso de distancia. El gap es lo que nos hace avanzar.
Así es. Me alegro de que te haya gustado el símil. Gracias por comentar.
Sigo a 3 de estos 4. Me gusta mucho como lo has hilado. Enhorabuena por el texto.
Pues el cuarto es más que recomendable.
Gracias por tus palabras.
Me encantó el símil del mapa. La esfera es, en efecto, el motor de nuestro progreso.
La aspiración a la totalidad es irrenunciable porque no es el destino, sino el vector de optimización. Nos da dirección.
El valor real reside en asegurar que cada nueva cara del poliedro que construimos sea una mejora medible respecto a la anterior, aunque la perfección esté siempre a un paso de distancia. El gap es lo que nos hace avanzar.
Me lleva a pensar en el plano de nuestros límites cognitivos.
Más allá de esto, un artículo genial. De esos que se agradece con el corazón porque es lo que uno mismo hubiera querido explicar ( y lo ha intentado alguna vez con penosos resultados) y lo encuentra aquí magníficamente realizado y con mil pinceladas de saber más.
Muchas gracias a ti. Es una satisfacción ver que la imagen sintoniza. En el fondo sabía que no es tan original.
No sólo es original, Javier, es brillante. La amplitud de tu conocimiento junto con tu manera única de hilar conceptos para fundamentar tus creencias y pensamientos forman un combo que da un resultado magnífico.
Tu versatilidad es apabullante y me resulta fascinante tu capacidad para conectar la información. Me encantaría ver por un agujerito tu proceso de escritura😅. Cómo se van engarzando las distintas ideas hasta dar forma al texto escrito.
Dicho esto, creo que la perfección de nuestro mundo reside en la imperfección del poliedro irregular que aspira a convertirse en esfera perfecta. Porque sin esa búsqueda infinita de lo inalcanzable, sin el misterio, ¿no habríamos llegado al fin de todo? Si no queda nada que preguntarse, si todo encaja de manera exacta y sin desviación, ¿dónde queda la duda y la imaginación, la creatividad y el crecimiento? La cuestión, quizá, está en cuánta de esa imperfección estamos dispuestos a aceptar como individuos o sociedad.
Por otro lado, no puedo evitar preguntarme - y preguntarte - si no existe en la historia de la filosofía el realismo "humano", o "humanista". Una suerte de realismo enraizado en una "ética compartida de mínimos razonables", citándote a tí mismo.
En cuanto a esa idea de la verdad... Me gustaría destacar que veo con preocupación como la diferencia entre verdad y realidad se está diluyendo en la actualidad. No digo que sea algo que se infiera de tu texto, para nada, sino que al leerte me ha recordado una conversación reciente con alguien que no tenía clara esta diferencia.
Me parece importante ahondar en la verdad como un constructo subjetivo que puede ser moral y éticamente aceptable o no, mientras que la realidad es, sin embargo, más susceptible de ser objetivable, si aceptamos la realidad como lo que ocurre en el mundo que nos rodea fuera de todo juicio moral o ético. Por eso creo que hay tantas verdades como individuos dentro de una misma realidad.
La confusión de ambos términos de manera intencionada para hacerlo todo más borroso por parte de "ideólogos" nos deja en indefensión ante el sistema. Si comenzamos a dudar de lo que ven nuestros ojos para aceptar como propia una supuesta verdad estamos en peligro de perder nuestra autonomía para pensar en libertad, si es que esto ha sido, es y puede llegar a ser posible.
Perdón por la perorata, pero tus textos tienen esa capacidad de activar la mente y buscar esas imperfecciones que nos acercan un poco más, si es posible, a lo inalcanzable.
Gracias por tu generosidad.😊
Gracias por la referencia y engancharlo como parte de este maravilloso mini-ensayo. 😊