Gospodínov ficciona en “Las Tempestálidas” otra faceta de la nostalgia (que nace de lo individual pero escala a lo político y colectivo). El texto arranca con la puesta en marcha de “clínicas del pasado” para ancianos con problemas de memoria donde se recrea al detalle su década favorita. Se extiende luego a nostálgicos de toda condición y la parábola desemboca en naciones que niegan el futuro y se refugian en sus mitos históricos, decretando por ley el retorno a un pasado idealizado. Muy pertinente, creo, en tiempos de oleaje reaccionario.
Te dejo otra definición de la nostalgia de índole nacionalista: "El bucle melancólico", de Jon Juaristi. O cómo el nacionalismo (vasco; pero también los demás) son la nostalgia por lo que nunca ocurrió.
Que no haya mucha nostalgia en tus Navidades. Un abrazo.
Las dos nostalgias de Boym son bastante clarificadores en cuanto a los aspectos de ese sentimiento tan potente. Como apuntas, la restauradora nos invita a un momento ideal, espléndido, que no solo nos provoca cierto anhelo de retorno, sino que desvirtúa el presente (por comparación); la reflexiva no solo habita en la ruina, sino en la posibilidad de que el cambio sea para mejor, que podamos levantar nuevos edificios a partir de todo lo derruido.
Y no podemos olvidar algo que también se suele explotar mucho en publicidad, aunque el término sea un tanto excéntrico: la «anemoia» o nostalgia por lo no vivido. Puesto que habitamos un mundo social, cada vez más interconectado, podría llegar a ser habitual el que añoremos cosas que no hemos visto, experiencias que no hemos pasado; ese deseo permanentemente insatisfecho puede ser usado para acicatearnos al consumo de todo aquello que anhelamos como posible, si bien nunca hemos poseído.
Un artículo excelente, Javier; estoy deseando saber de esos nuevos proyectos que te guardas en la manga.
Gospodínov ficciona en “Las Tempestálidas” otra faceta de la nostalgia (que nace de lo individual pero escala a lo político y colectivo). El texto arranca con la puesta en marcha de “clínicas del pasado” para ancianos con problemas de memoria donde se recrea al detalle su década favorita. Se extiende luego a nostálgicos de toda condición y la parábola desemboca en naciones que niegan el futuro y se refugian en sus mitos históricos, decretando por ley el retorno a un pasado idealizado. Muy pertinente, creo, en tiempos de oleaje reaccionario.
Muy acertado. La desconocía. Gracias, Eugenio.
A tí por el regalo de esta lectura matutina :)
Fantástico mini-ensayo.
Te dejo otra definición de la nostalgia de índole nacionalista: "El bucle melancólico", de Jon Juaristi. O cómo el nacionalismo (vasco; pero también los demás) son la nostalgia por lo que nunca ocurrió.
Que no haya mucha nostalgia en tus Navidades. Un abrazo.
Gran apunte, Ignacio. Gracias.
Felices días, igualmente.
De mis ediciones favoritas Javier ♥️ La definición de nostalgia como el dolor de no poder regresar me ha hecho pupa... Felices fiestas compañero 🧑🎄
Mucho ánimo, Iker. Y felices fiestas! Un abrazo.
Compartido en grupo de Facebook (https://www.facebook.com/groups/294570597275308/permalink/9086320744766872/?)
Las dos nostalgias de Boym son bastante clarificadores en cuanto a los aspectos de ese sentimiento tan potente. Como apuntas, la restauradora nos invita a un momento ideal, espléndido, que no solo nos provoca cierto anhelo de retorno, sino que desvirtúa el presente (por comparación); la reflexiva no solo habita en la ruina, sino en la posibilidad de que el cambio sea para mejor, que podamos levantar nuevos edificios a partir de todo lo derruido.
Y no podemos olvidar algo que también se suele explotar mucho en publicidad, aunque el término sea un tanto excéntrico: la «anemoia» o nostalgia por lo no vivido. Puesto que habitamos un mundo social, cada vez más interconectado, podría llegar a ser habitual el que añoremos cosas que no hemos visto, experiencias que no hemos pasado; ese deseo permanentemente insatisfecho puede ser usado para acicatearnos al consumo de todo aquello que anhelamos como posible, si bien nunca hemos poseído.
Un artículo excelente, Javier; estoy deseando saber de esos nuevos proyectos que te guardas en la manga.
Un saludo y que pases unas muy felices fiestas.
Muchas gracias, Emi, y felices fiestas a ti también.
Artículo interesantísimo! Gracias. Feliz Navidad, con o sin nostalgia!